Cuando hablamos de sacarle provecho a nuestras cualidades capilares del rostro, siempre nos referimos a la barba y al bigote en general, pero a muchos hombres se les escapa el hecho de pensar que también las cejas forman parte de la cara y, por ende, de nuestra carta de presentación ante el mundo. Como parte del auge en el mercado masculino del cuidado personal, la forma de las cejas es una parte importante, ya que es uno de los puntos clave de nuestro rostro en el que se posan las miradas de nuestros interlocutores, por lo que hoy daremos respuesta a una gran pregunta: ¿está bien que los hombres intervengamos nuestra ceja para vernos mejor?
Mírate frente al espejo un buen rato
Antes de caer en la desesperación, siéntate frente al espejo y mira qué tipo de ceja tienes, ya que quizá no sea necesario recurrir a nada o, al menos, no hacer un cambio drástico. Estudia la forma de tu rostro y de cómo la ceja ayuda a enmarcar tu mirada: ¿Tienes una ceja muy arqueada o recta? La mejor forma de saber cómo es que quedaría antes de usar pinzas o la temida cera caliente es con ayuda de un lápiz delineador (si, de esos que seguramente tu novia o hermana carga en su bolso siempre) para remarcar tu ceja y enfatizar la nueva forma que quieres que tenga, así, los vellos que quedan sin pintar serán los que eliminarás.
Adiós a la cera y al rastrillo
Uno de los consejos básicos para la eliminación del vello en el rostro es el de dejar de lado utensilios metálicos. Rasuradoras, perfiladores, maquinas de afeitar y demás son aplicables y más recomendables para zonas con vello más abundante, pero para la ceja, unas pinzas son la opción perfecta para garantizar precisión sin la irritación propia de las navajas.
La ceja en la zona “T” del rostro
Aunque te aterre la idea de eliminar vello de tu cara, tienes que saber que la ceja define mucho sobre el cuidado de nuestro rostro, por ello lo más recomendable es eliminar el entrecejo en la misma dirección y altura de la nariz y la frente para evitar parecer un neandertal. Si la ceja te llega hasta la parte superior del párpado, elimina el vello suficiente para que esta parte del ojo no se vea tan profunda y le haga sombra a tu mirada, haciéndola lucir apagada.
En cuanto a la parte final de la ceja, lo mejor es analizarla de perfil: si tu ceja es muy arqueada evita que llegue hasta donde se formen las líneas de expresión del ojo para evitar una mirada de aspecto cansado, ya que por lo general son las cejas con un diseño recto las que proyectan una mirada más optimista.
Ahora que lo sabes, no está mal pensar que hay algunos vellos de sobra por encima de nuestros ojos, sin embargo, evita en lo posible caer en el error de imitar a Cristiano Ronaldo en su época más metrosexual.
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